Y seguimos descubriendo caminos mágicos que nos llevan a vivir momentos muy creíbles!!! Esta vez nos fuimos a Playa La Propia o Care-Care, una de las que están entre Playa el Agua y Manzanillo y que sólo tienen acceso por agua, en alguna embarcación o haciendo la ruta a pie… Salimos a las 8 AM y el clima fue benevolente, pues nos acompañó una nube dándonos sombra tooodo el trayecto… el camino muy suave, casi sin pendiente y sin peligros, desde que salimos de Playa Patilla, esa que queda al finaaaal de Playa el Agua, pasando la montañita… hermosísima!!! (Refugio de isleños y de visitantes asiduos que se conocen el “secretito”)… bueno… nos deleitamos en el camino cosechando Pitigüey, esa fruta del melón de monte (cactus abundante de esta región), color fucsia y con unas pepitas negras aciditas y crujientes en su gelatinoso interior… ellas fueron las que nos dieron esa energía bonita para hacer la ruta de un solo jalón!!! Y ya bajando hacia La Propia, se abrieron las montañas para ofrecer a nuestros ojos una de las vistas + hermosas que hemos presenciado… una bahía color turquesa y de tonos aguamarina transparentes, como si se tratara de unas piedras preciosas montadas en un mar de plata… mansa, con los destellos matutinos que le daban una vida propia… la mejor parte fue meternos en sus aguas, apenas llegamos, y sentir la temperatura perfecta en nuestros acalorados cuerpos, esas aguas, generalmente friísimas, de esas latitudes estaban temperadas, un paraíso para nosotros, que agradecimos y nos maravillamos de tanta perfección!!!
Hasta meditamos dentro del agua y llegaron peces y “bailarinas” (una especie de moluscos sin concha, que bailan en el agua) a acompañarnos, luego de desayunar lo que llevamos: fruta fresca, agua y sándwiches… exploramos las cercanías y nos lanzamos rodando desde la montañita de arena que es parte de la playa… gozamos como niños “empanizados de arena”… descubrimos tesoros en otras playas aledañas: troncos, palos, pequeñas boyas de los pescadores de ahí cerca… Ya al medio día nos pusimos a hacer la parrilla de pollo, en la playa siempre van a encontrar una rejilla en las rocas que todo el mundo respeta y que nos turnamos (en caso de que llegue más gente con la misma intención), después de comer, reposar y seguir bañándonos tomamos el regreso… más fotos, más risas y más Pitigüeis!!!
Un día perfecto con los acompañantes idóneos: la familia y los Amigos!!! Los Caminantes de la Ruta del Pitigüey, que fue como la bautizamos… otro de los Maravillosos paseos de nuestra Isla Bella…MARGARITA!!!
Patricia Oliva
No hay comentarios:
Publicar un comentario